Para detectar el engaño olvídate de los indicadores de tensión, nerviosismo y ansiedad.
«Algunos estudios indican que los embusteros no sienten más ansiedad que los que dicen la verdad»*.
Para descubrir con éxito la mentira deshazte de los mitos sobre el comportamiento que rodean la hipótesis de la ansiedad y busca indicios**:
1/ Indicios que suelen relacionarse con alguien que piensa detenidamente. (Mentir supone pensar en lo que los demás ya saben o podrían averiguar y en lo que encaja con lo que hemos dicho antes).
2/ Que de repente está más quieta y hace menos gestos.
3/ Disminución súbita de los detalles.
4/ Aumento de pausas y vacilaciones.
Tenderá a distanciarse de la mentira…
5/ Usando poco «yo», «a mí», «mío».
6/ Usará «su» o «suyo» en lugar de utilizar el nombre propio.
7/ Aumento de las evasivas.
Pide que te manden correo electrónico. Somos más reacios a mentir en los e-mail porque quedan registrados, así que nuestras palabras podrían regresar para atormentarnos.
Notas:
* R.H. Gramzow, G. Willard, y W.B. Mendes, «Big tales and coold heads: academic exaggeration is related to cardiac vagal reactivity», Emotion, nº8,2008, páginas 138-144.
** A. Vrij, «Wy professionals fail to catch liar and how they can improve», Legal and criminological psychology, nº9, 2004, páginas 16-183.